A pesar del sufrimiento causado por el EI, la niña Myriam, dice que está agradecida a Dios por tener un lugar para vivir y su corazón está lleno de perdón a los que destruyeron su antigua vida y mataron a muchos de sus amigos.
Ahora está viviendo con su familia en un centro comercial a medio construir en el norte de Irak, la niña recientemente tuvo una reacción impresionante cuando un periodista le preguntó si pudiera tomar represalias contra los terroristas, qué les haría.
"No les haría nada a ellos", dijo Myriam al canal SAT-7, una cadena de televisión en lengua árabe. "Yo sólo voy a pedir a Dios que los perdone".
Cuando el reportero le preguntó si ella también podía perdonar al Estado Islámico, ella respondió: "Sí."
Además de la compasión de Myriam contra sus enemigos, también explicó cuán profundamente su vida ha cambiado desde que ella y su familia fueron expulsados de su hogar en Qaraqosh, Irak, y ahora están viviendo en el centro comercial Ainkawa con muchos otros, de acuerdo con la Christian Post.
"Solíamos tener una casa y estábamos entretenidos, lo que no pasa aquí", dijo la niña. "Pero gracias a Dios. porque provee para nosotros".
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